A un puente de distancia de Pereira, Dosquebradas es moderna, vibrante y perfecta para quienes disfrutan del ambiente urbano con un toque de intimidad. La zona de La Pradera es el corazón de la vida nocturna, con bares lounge, restaurantes y discotecas que se llenan de música y luces suaves. En lugares como Menta y Romero o Don Pascual Parrilla, la noche comienza con buena comida y copas compartidas.
Para quienes buscan descanso o momentos reservados, los hoteles cercanos al Viaducto César Gaviria y los moteles de la vía a Santa Rosa de Cabal ofrecen privacidad con estilo. Algunos incluso cuentan con jacuzzi, iluminación tenue y decoración moderna para crear la atmósfera ideal.
Las parejas disfrutan de paseos por el mirador de Dosquebradas, desde donde se observa la ciudad iluminada, o una caminata nocturna por el Parque El Lago. Este municipio risaraldense tiene una energía sutil pero intensa: la mezcla perfecta entre ciudad, montaña y deseo.